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Medidas para sector aviar, lechero y del trigo
12 de mayo de 2023
El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció hoy una serie de medidas para el sector avícola, lechero y triguero, que consisten en programas de ayuda para paliar de la sequía, los problemas relacionados con la aparición de la gripe aviar e incentivos para impulsar el crecimiento en la superficie sembrada con el cereal.
Massa, en un acto realizado en el partido bonaerense de Navarro, junto con el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, el ministro de Desarrollo Agrario bonaerense, Javier Rodríguez, y funcionarios comunales, presentó el Plan Aviar, que cuenta con un fondo de $7.500 millones que estará destinados a asistir a productores avícolas comerciales y de traspatio que debieron sacrificar animales a causa de la gripe aviar.
También dio a conocer la implementación de una quinta cuota de Impulso Tambero, que con un fondo de $2.756 millones buscará aliviar «la situación de las y los productores de leche ante la sequía y las condiciones macroeconómicas que impactaron sobre el costo de producción».
A esto se sumó el adelanto de una serie de incentivos que el Palacio de Hacienda pondrá en marcha para impulsar la producción de trigo, ante el inminente inicio de la campaña fina.
En ese marco, Massa anunció que se avanzará en una reforma de la Comunicación 7720 del Banco Central, con el fin de mejorar el acceso al crédito, como también una modificación de los montos para acceder a mayor crédito.
También se trabajará en un programa de financiamiento de canje con productores y exportadores, para que los granos puedan ser utilizadas como instrumento de pago en la adquisición de fertilizantes, agroquímica y otros insumos.
«Estamos frente a la peor sequía de los últimos 100 años de la Argentina. Estamos enfrentando una sequía que para que se tome dimensión del daño que le produce a la economía, le arrancó de un mes para otro el 20% de la facturación, de la producción, exportaciones e ingresos que nuestra Nación tenia previsto», enfatizó Massa.
«También nos llevó a tener que cuidar el circuito productivo de la Argentina porque por cada productor que por la sequía se nos cae, cada uno de nuestros emprendimientos que se caen, cuesta mucho levantarlo. Nuestra asistencia tiene que ver con tenderle la mano para que siga caminando aun con dificultades», agregó el ministro.
El titular del Palacio de Hacienda detalló que «la primera medida es aumentar la inversión en el Programa Impulso Tambero, subiendo el precio que pagamos al productor en 7 de cada 10 tambos y la idea es tratar que todos aquellos que necesiten nuestras asistencia para seguir manteniendo su volumen de producción cuenten con la inversión pública para poder asistirlos».
De esta manera, los valores pasarán a ser de $20 por litro para los productores de hasta 1.500 litros, y de $15 para los productores de entre 1.501 litros y 5.000 litros inclusive.
Además, se aumentará el tope máximo de ayuda por productor a $800.000, de forma extraordinaria para esta cuota.
«La segunda decisión es enfrentar la gripe aviar. Primero cuidar el mercado interno para que haya pollo y huevo en la góndola pero también asistir a nuestras granjas que tuvieron que seguir produciendo. Tomamos la decisión de invertir $ 7.000 millones de asistencia no reintegrable para proteger, promover el circuito productivo», agregó Massa.
Los beneficiarios serán aquellos productores que afrontar el sacrificio de aves de corral y la destrucción de huevos fértiles, huevos para consumo, con motivo de la detección y/o sospecha de contagio por estas enfermedades, en el marco de la gripe aviar.
El monto de la asistencia por productor se determinará a partir de la valoración económica de las categorías de aves domésticas y productos (huevos) realizado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y de las cantidades de aves sacrificadas y productos destruidos
Asimismo, «el acceso a los programas será simple, porque los datos sobre los que se calcula el beneficio se encuentran en el sistema informático del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y surgen de las actas de sacrificio digitales (Sigactas).
Por su parte, los productores cuyos animales fueron sacrificados previamente a la puesta en vigencia de estos programas en el marco de las medidas sanitarias dispuestas por Senasa, contarán con 30 días para solicitar el ingreso a los mismos.
En los demás casos, los productores afectados podrán realizar la solicitud a partir del día 6 de conformada el acta de sacrificio y hasta 30 días posteriores a la misma.
Mientras que la quinta cuota de Impulso Tambero incluye una actualización de los valores del beneficio para asistir a los productores afectados por la sequía y las condiciones macroeconómicas que impactaron en el costo de producción.
Por su parte, el secretario Bahillo destacó la importancia de los programas anunciados, al sostener que el objetivo del Gobierno es «ayudar» al sector agropecuario que resultó afectado por la sequía.
«Buscamos que las pymes agreguen valor porque generan arraigo, desarrollo y crecimiento local; hoy nos convocan a esta reunión que tiene que ver con sectores que son los que más promueven el arraigo y desarrollo territorial: la avicultura y la lechería», dijo Bahillo.
Por último, Massa adelantó -de cara al inicio de la campaña de siembra de trigo y teniendo en cuenta la voluntad del Gobierno de que haya un aumento en el área sembrada del cereal- la puesta en marcha de una serie de «incentivos».
«Tomamos la decisión de avanzar en un programa de financiamiento de canje» para que los productores puedan acceder a insumos cono fertilizantes y agroquímicos, pero también «impulsar dos cambios esenciales» en cuestiones crediticias.
Uno de ellos es reformar la Comunicación 7720 del Banco Central, que fija limitaciones para productores que cuenten con existencias del 5% de trigo o soja para poder acceder a créditos con tasas subsidiadas.
Asimismo, planteó otra modificación en cuanto al «piso de los montos» de los créditos.
«Si damos créditos para producir, si habilitamos mecanismos de canje, seguramente este problema que hoy nos toca enfrentar a nosotros, el próximo gobierno, sea del color político que sea, lo deberá enfrentar con menores dificultades, porque va a tener más maíz, girasol, trigo y soja entendiendo que el campo es uno de los motores de la economía», finalizó Massa.
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NI MUUU: ‘Qué culpa tenemos’
La provincia de Buenos Aires enfrenta múltiples desafíos en áreas como infraestructura y educación, pero un nuevo proyecto de ley que busca gravar las emisiones de gases de efecto invernadero ha generado controversia.
Según expresaron al unísono las entidades del sector productivo, la iniciativa carece de sustento y no aborda los verdaderos problemas que afectan a los productores locales. Así lo manifestó de forma contundente el presidente de la Confederación de Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) Ignacio Kovarsky a El Campo Hoy.
"Habiendo tantos temas para solucionar; desde infraestructura, educación, un montón de temas para la provincia de Buenos Aires y bueno, acá al parecer lo único que importa es agarrar cualquier tema para grabar con impuestos y recaudar más y soluciones cero".
El ruralista también afirmó que el concepto de emisión de gases utilizado en la iniciativa es obsoleto y que el enfoque actual debe ser sobre el equilibrio y el balance en lugar de solo la emisión.
Kovarsky destacó que el sistema ganadero argentino, basado en pastizales extensivos, no solo es neutro en términos de emisiones, sino que también contribuye positivamente al secuestro de carbono.
"Justamente el sistema ganadero de Argentina con pastizales extensivos y demás, y con muy pocos casos de animales en feedlot, ahí es donde vemos que es justamente no solo neutro, sino positivo la cantidad de captación, secuestro del carbono a través de la fotosíntesis de nuestros pastizales respecto de lo que se emite".
En cuanto a la situación del rodeo bovino en encierres a corral, el experto aclaró que "no es el porcentaje, sino el tiempo" que los animales pasan en pastizales antes de ser llevados a engorde en feedlot. "La vaca de cría eternamente está sobre pastizales, que es la mitad o más de la ganadería argentina". Este enfoque resalta la importancia de considerar el ciclo completo de producción en lugar de centrarse únicamente en las emisiones.
Buenos Aires bajo el agua
Sobre el plan de ayuda anunciado por el gobierno nacional, indicó que se está formando una mesa de trabajo que busca coordinar esfuerzos locales. "Sé que se bajó maquinaria; la Provincia hace un tiempo que había aportado, y Nación estaba bajando maquinaria tanto en 9 de julio, Casar es Bolívar y Bragado, por ejemplo". Sin embargo, subrayó la necesidad de acelerar los procesos y concretar las ayudas reales.
Finalmente, mencionó que se está trabajando en un presupuesto destinado al nodo Bragado, aunque se reconoce que "hace falta más: se deben licitar y ejecutar obras complementarias para mitigar inundaciones, que son un problema cíclico en la región. Hay que ejecutarlo con mayor velocidad. Entendemos que van a llegar más dragas ahora creo que en enero, pero hace falta acelerar eso".
El rechazo de CRA
Desde CRA rechazaron el intento de imponer una “tasa al metano bovino”. En una gacetilla dada a conocer ayer, expresaron que "una diputada impulse cobrar un impuesto por los gases que emiten las vacas no es una discusión ambiental: es otra muestra de la capacidad de daño de dirigentes que, lejos de comprender cómo se produce en Argentina, vuelven a atacar al sector que sostiene al país. Como señaló CARBAP, cobrar por respirar a las vacas no reduce emisiones, reduce producción.
La entidad expresó que la ganadería argentina alimenta al mundo, genera miles de empleos y moviliza economías regionales. "Inventar una Tasa Ambiental sobre el Metano (TAMBA) es simplemente seguir esquilmando al que produce, cargando más impuestos sobre quienes ya enfrentan una de las presiones fiscales más altas del planeta. Y, para colmo, sin aportar ninguna solución técnica seria o viable".
Finalmente sostuvieron que desde CRA van a seguir defendiendo la producción, el trabajo y la gente que todos los días sostiene al país, "frente a políticas que solo buscan frenar, castigar y asfixiar a quienes producen". radio Cadena3
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Hay productores que emiten menos GEI: ¿Quiénes son y cómo lo logran?
Un informe de la Red de Carbono de Aapresid revela los puntos en común entre los manejos de mayor eficiencia ambiental. Además: los cultivos que más emiten y las estrategias de mitigación.
La nueva edición del Informe de la Red de Carbono de Aapresid deja un mensaje contundente: los productores que integran la red generan sistemáticamente menos emisiones de gases de efecto invernadero que la media nacional construida en base a información de monitoreos en más de dos millones de hectáreas en todo el país.
En un escenario global donde la huella climática comienza a definir accesos a mercados, precios y exigencias de trazabilidad, contar con evidencia local que demuestre la performance de los sistemas agrícolas argentinos resulta estratégico.
El Informe 2025 de la Red sintetiza la cuantificación de emisiones GEI y balance de carbono de los suelos sobre más de 700 mil hectáreas distribuidas en 16 zonas agroecológicas. Se cuantificaron las emisiones directas e indirectas generadas tranqueras adentro asociadas al manejo agrícola: uso de combustibles fósiles, fertilización, descomposición de residuos, aplicación de insumos y consumo de energía.
EL dato: cuando se comparan las emisiones por hectárea y tonelada generadas los productores Aapresid y un índice nacional en base a 2 millones de hectáreas se observa una diferencia sistemática y favorable para los primeros en prácticamente todos los cultivos.
“Esta brecha se asocia a manejos más eficientes, fertilización ajustada al diagnóstico, menor cantidad de labores y decisiones agronómicas que permiten sostener mayores niveles de productividad con igual o menor uso de insumos”, explica el Informe.
Emisiones según cultivo: ranking y fuentes
En términos generales, las emisiones por tonelada de rinde varían según el cultivo: el trigo se lleva el primer puesto como el cultivo que más emite, seguido por la cebada.
En cuanto a las fuentes de emisión, también varían según el cultivo: en maíz, trigo y girasol están explicadas mayormente por el manejo de la fertilización nitrogenada, mientras que en soja y legumbres, por las labores y el uso de fitosanitarios.
A medida que el rinde aumenta la intensidad de emisiones disminuye. Así, los sistemas que logran convertir más biomasa con la misma inversión tecnológica emiten menos.
Sin embargo, el Informe aclara que “el incremento del rendimiento no constituye por sí mismo una estrategia de mitigación, sino que la mejora ambiental se logra con mayor eficiencia productiva: buenos diagnósticos, optimización del uso de insumos, manejo adaptado al ambiente, planificación de rotaciones, eficiencia en el manejo de plagas y estabilidad productiva en el tiempo”.
¿Qué pasa con el carbono del suelo?
El análisis se complementa con la evolución del carbono orgánico del suelo, un indicador clave de salud y resiliencia. Si bien los incrementos de carbono son modestos incluso en rotaciones intensificadas, gran parte de los sistemas evaluados muestran estabilidad en los niveles de carbono, lo que confirma la capacidad de la Siembra Directa y de las rotaciones diversas para sostener la fertilidad y la estructura de los suelos en el largo plazo. Las mayores pérdidas se registran en esquemas dominados por monocultivos o por secuencias exclusivamente gramíneas o leguminosas, mientras que los mejores resultados se observan en planteos que combinan cultivos de verano e invierno, incorporan cultivos de servicio y mantienen una cobertura continua del suelo.
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Ruralistas piden por las obras de la cuenca del Salado antes de 2030
La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) lanzó un fuerte reclamo político hacia los gobiernos municipal, provincial y nacional, en medio de una inundación que ya lleva nueve meses y que afecta gravemente al corazón productivo bonaerense.
En un comunicado, CARBAP responsabilizó directamente a las autoridades por la falta de obras y advirtió que la situación evidencia “promesas incumplidas, demoras injustificadas y absoluta falta de voluntad política”.
Según un relevamiento realizado sobre imágenes satelitales del 11 al 13 de noviembre, en la cuenca del río Salado -que abarca unas 17 millones de hectáreas- 2 millones aparecen inundadas o anegadas y 3,8 millones están afectadas de manera tal que quedaron fuera de producción: sin piso, sin caminos transitables y sin posibilidad de ingreso de maquinaria.
La entidad ruralista fijó un objetivo tan claro como urgente: las obras del Plan Maestro del Río Salado deben completarse por completo antes de 2030. Y definió esa meta como “innegociable”.
“No es un slogan ni un deseo. Es una obligación moral, productiva y social”, afirmó CARBAP.
La organización recordó que el plan no exige tecnologías complejas ni obras extraordinarias: “Hablamos de canales, puentes y obras hidráulicas básicas, para las cuales Argentina tiene ingenieros, técnicos y maquinaria. La capacidad existe: lo que falta es decisión política”.
CARBAP también cuestionó el argumento oficial de la falta de recursos. “Frente a quienes repiten ‘no hay plata’, la respuesta es simple: en esta cuenca sí hay plata; la generan los productores y la recaudan los tres niveles del Estado todos los años”.
Por eso, la entidad exigió compromisos públicos y verificables tanto del Gobierno actual como de los futuros gobernantes para garantizar que el plan se ejecute íntegramente.
El comunicado concluye con una advertencia: “Las inundaciones no esperan. La producción no espera. La familia rural, la educación, la salud, la seguridad y el futuro del interior productivo tampoco pueden seguir esperando”.
FUENTE: Noticias Agropecuarias.

