9 de diciembre de 2022

En la Misa de Clausura de la 49 Marcha de la Esperanza y frente a miles de peregrinos que acompañaron a la Virgen desde la Gruta de Lourdes, el padre obispo agradeció y felicito a los caminantes por su fervor y amor a la Virgen. “María es la capitana del partido de la alegría de Dios”. También saludó a las personas que siguen la transmisión por las redes y radios del obispado.

En su homilía el padre obispo Gabriel dijo “Hoy jueves 8 de diciembre, en el día de la Inmaculada estamos clausurando la Marcha de la Esperanza número 49. Y lo hacemos en la fiesta de la Virgen junto a todos los peregrinos y lo invito a que podamos jugar junto 3 partidos. El partido de Dios. El segundo puntito es el partido de María y el tercero es el partido de la alegría.

En el partido de Dios, como primer punto. En el Evangelio de hoy, en el versículo 35 del Capítulo 1 de Lucas se nos dice que María va a ser la madre del Salvador, expresa con claridad “el Espíritu Santo descenderá sobre ti, El poder del altísimo te cubrirá con su sombra porque el Niño será Santo”. En este breve versículo está la Trinidad de Dios, Padre, Hijo y Espíritu santo que nos invitan a abrir nuestro corazón en este fin de año para jugar en serio el partido de Dios, sabiendo que con Él tenemos la fuerza en nuestro corazón para continuar adelante con tantas cosas lindas y también con tantas dificultades que el horizonte de la vida nos plantea. Jugamos entonces en el primer puntito el partido de Dios, juntos como equipo.

En el segundo puntito es sobre María, la que hoy celebramos como la Inmaculada. Jugamos el partido de María con su actitud de fidelidad a Dios. Como dice el final del Evangelio de Hoy: “que se haga en mí según tu palabra”, siendo dócil a lo que Dios tiene como proyecto para ella. La Virgen siempre intercede por nosotros, ella nos acompaña, ella es la madre del equipo para que juguemos el partido sinodal juntos, siendo fieles al amor de nuestra Madre y de Jesucristo.

El tercero es el partido de la alegría. El mensaje que le da el ángel de parte de Dios a María es “alégrate” y todos somos invitados a compartir esta alegría que nos viene de Dios, al celebrar la fiesta de la inmaculada y haber caminado Juntos por las calles de nuestra ciudad, tocando nuestros barrios, el puerto, el centro y habiendo meditado y reflexionado sobre tantas realidades. Con la fuerza de Dios y la intercesión de María juguemos juntos el partido de la alegría que nos viene de Dios. La alegría del Evangelio y alegría que el Ángel le trasmite justamente a María. Dejemos que María sea la capitana de nuestra vida, “María es la capitana del partido de la alegría de Dios” y nos enseñe a jugar el partido de Dios y el partido de la alegría siempre y en toda circunstancia» finalizó el obispo.
Video José Ferre

Fotos Elena Navas